¡FELIZ NAVIDAD 2015! (Y FELICES FIESTAS)

Una vez más, ya estamos en esas fechas de "borrón y cuenta nueva", en esas que toca echar la vista atrás y ver todo lo que hemos hecho este año y en esas que toca planificar todo lo que vendrá en el siguiente. Pero también son unas fechas en las que, a pesar de estar de vacaciones, no paro un segundo y en breve tocará de nuevo desconexión por otro viajecillo.

Por eso, quedarán varias cosas pendientes como la crónica de la Ultramaratón del sábado pasado, el resumen del año, el ranking de las mejores pruebas en las que he participado, los objetivos de esta temporada y un montón de novedades más en cuanto a material, entrenos, club, lugares de entrenamiento...

Como ya sabéis, este ha sido el "año del cambio". Esta pasada temporada he descubierto el "trail running" y reconozco que me ha enganchado, al igual que lo hizo el triatlón hace algunos años. Después de varias pruebas, la ilusión por seguir progresando y conociendo más cosas de este deporte aumentan las ganas y la ilusión de competir y conocer un montón de pruebas a lo largo de la geografía española. Sin embargo, el triatlón seguirá estando ahí; sin ir más lejos, después de varios medios en los que participé este año, toca dar el salto a la distancia Ironman "antes de que se me pase el arroz". 

De todas formas, todas las novedades para este año que pronto comenzará os las comunicaré en breve, con un poco más de calma. 

Por lo de ahora, toca despedirse de este, que me ha dado muchas alegrías, me ha permitido participar en algunas pruebas increíbles como "Aviaman", "Soplao", "Sisargas", "Ézaro"... un año espectacular con un pequeño lunar desde ese esguince a finales de agosto que me ha tenido más de 2 meses arrastrando problemas que por suerte ya han desaparecido.

Pero la nota tiene que ser, de nuevo, muy alta. Poder disfrutar haciendo deporte y participando en estas carreras con un montón de gente cojonuda no tiene precio. Y tener las ganas y la ilusión intactas para seguir haciéndolo también es impagable. Por todo ello, estoy muy contento de todas las experiencias del 2015, quedándome con lo bueno y aprendiendo de lo malo y tomándome estos últimos días de celebración y reflexión para iniciar el 2016 con mucho ánimo y dispuesto a cumplir un montón de sueños deportivos.

De momento, vamos a disfrutar con la familia, a contar las típicas anécdotas en las comidas (como la de la zapa en el trail de Arteixo, esa es muy buena...), a saborear lo vivido en los últimos meses y a pedir por otro año repleto de pruebas y aventuras "con final feliz"...