sábado, 13 de junio de 2015

92ª COMPETICIÓN: BIERZO TRIMAN: ENCERRONA

Sábado, 6/6/15, 16:00 h.
BIERZO TRIMAN (Ponferrada)
Distancia: 1.8 km (2 v.) + 60 km (1 v.) + 15 km (3 v.)
Dificultad: media - baja (inicio bici duro)
Inscripción: 60 euros
Tiempo: 3h 53' 03"
Tiempo del 1º: 3h 11' 30" (- 41' 33")
Puesto: 49º de 200
Avituallamientos intermedios: agua, isotónico
Avituallamiento final: pizza, tortilla, pasta, agua...
Trayecto desde Betanzos: 1h 45' - 185 km
Puntuación: 6/10
Repetiría: Dudoso
CLASIFICACIÓN
Por primera vez, y sin que sirva de precedente, acabé fastidiado una carrera. Aún encima, por causas ajenas a mi esfuerzo o lances propios de una carrera como esta. Eso sí, al día siguiente ya se me había pasado, aunque siempre quedará ese regusto amargo de lo que podría haber pasado si un juez no me animase a hacer 8 o 9 km más en el circuito de bici con el consiguiente bajón mental que volvió a subir en la carrera. Pero como siempre, mejor desde el principio.
Sábado, 6 de junio de 2015. 11:00 h. Día grande, más de 20 compis de mi equipo, el Triatlón Coruña, vamos a participar en la I edición del "Bierzo Triman", con una pintaza en Villafranca del Bierzo y una distancia ideal para mí, entre olímpico y half. Desayuno, preparo mochila, comida y en menos de 2 horas llegamos con
buen día, demasiado. Cómo pegaba. Una de las novedades de esta prueba es que la T1 (el lugar donde se nadaba y se hacía la transición a la bici) estaba a 20' de Villafranca, donde se hacía la T2 y la meta. Así que tuvimos que ir a Carucedo (T1) a por los dorsales y a dejar la bici. Allí me encontré a un montón de amigos entre los que comentaban la temperatura del agua y si dejarían o no nadar con neopreno. Buff, lo que faltaba, 1800 metros a pelo. Dejo todo listo y nos vamos a Villafranca a colocar los tenis y la gorra en la T2. Ya son casi las 13:30 h. y el último bus que pone la organización para llevarte a la salida es a las 14:00 h. (la prueba era a las 16:00 h.). Casi que paso, como tranquilo y que me lleve Patri en coche, no me voy a agobiar ahora para estar allí 1 hora mirando los pájaros.
Así que nos vamos, junto con Jesús de mi equipo, a buscar un restaurante en el centro de Villafranca. Sin pensármelo mucho y mientras Jesús prueba 2 bocados, me meto entre pecho y espalda un plato de pasta, otro de filetes empanados con patatas fritas y un trozo considerable de flan casero. Todo esto a menos de hora y media de la prueba. Vamos, que por energías no iba a ser... Al final hablamos con Rober (del equipo) y ya nos lleva él. Llegamos a Carucedo 1 hora antes de la carrera, caían los pájaros del calor. Voy al baño, 20' de espera y no llego a la foto del equipo... ¡me cago en tó! Pero al menos dejan poner neopreno y me lo enfundo mientras explican las normas de la prueba. Quedan 10' para la salida y Fer (uno de mis compis de entrenos) consigue arreglar un pinchazo producido por el calor. Nos
lanzamos al agua para soltar los brazos y está perfecta. Sí, se puede nadar sin neopreno. Pero tampoco es un calor agobiante. Así que nos colocamos en la salida junto con Lucas y esperamos la señal... ¡al agua patos!

SECTOR NATACIÓN (1.8 km, 2 vueltas)
Como casi siempre mi buena elección de "al fondo a la derecha" me permite salir sin golpes ni agobios, aunque al ser tantos siempre tienes algún roce. Pero el lago de Carucedo es perfecto para nadar y el único problema se produce al llegar a la 1ª boya que hago por dentro y tengo que pedir a la gente que tenga cuidado, porque hay mucho animal. Después de 30 metros a braza vuelvo a coger ritmo y nado hacia la 2ª boya (circuito en forma de triángulo) que se me hace
eterno. Aún encima, en la montonera de esta boya el simpático de delante (uno de esos animales que nombro antes) se le ocurre dar piernas como si no hubiera un mañana, vaya gilip... Me calza un patadón en el pecho que si me da en la barbilla me rompe los dientes. Paro un momento, respiro hondo para comprobar que todo sigue en orden y de nuevo al lío, qué pena no poder quedarme con la matrícula. De la 2ª a la 3ª la distancia es más corta y completamos la 1ª vuelta al lado de la gente que anima sin parar. Aunque el juez dijo que se podía nadar sin problema, aquí el agua cubre por la cintura y todos se ponen de pie, así que imito y me lanzo a por la 2ª vuelta. Como sucede siempre, aquí ya nadas con tu espacio y empiezas a pensar en cómo hacer la T1 y en el siguiente sector, por lo menos es lo que me pasa a mí. Hago la 2ª vuelta en lo que me parece una eternidad (desde la orilla se veían más cerca) y me 
convierto en la salchicha del perrito en los últimos 200 metros porque se me empiezan a cerrar los que llevo a los lados. Para ahorrarme disgustos hago "una serie" y cojo los metros suficientes para llegar cómodo a la orilla parando el crono en 34'52", parcial 94º. Flipante, entre los 100 primeros y soy un pato. Llego a la T1 justo cuando mi compi Lucas arranca y empiezo el picnic. Quito el neopreno, seco los pies, calcetines, casco, portadorsal y a la encerrona. 
SECTOR CICLISTA (60 km, 1 vuelta)
Salgo entre cabras a volar en este "circuito llano" con una pequeña subida al principio "para separar a la gente". Subo a mi MMR (no llevé la cabra porque he decidido no usarla más) sin ruedas de perfil (se las dejé a mi compi César para la prueba) y a los 300 metros comienza la cronoescalada, plato pequeño y a subir. Miro hacia arriba y la fila de ciclistas es curiosa, parece una marcha y algunos ya van zigzagueando. Empiezo a pasar gente aunque
 tampoco voy sobrao, nada más salir del agua tirar para arriba con el pulso acelerado no es mi fuerte. La carretera está llena de curvas y cuando crees que termina la cuesta... viene otra. Llevo todo metido y después de 2 km... ¡veo a gente caminando! Sí, sí, con la bici en la mano. Circuito llano. Flipante. Mientras veo retorcerse sobre la bici a los que llevan cabra, sigo pasando a compis de mi club: Álvaro, Juan, Jesús, Lucas... y sigo para arriba. Después de 5 km y sufriendo de pie aquello ya se ha convertido en una broma. Cazo a Héctor al final del puerto y a Julio un poco más adelante, pero después de un poco de llaneo la carretera se vuelve a inclinar y toca meter todo y seguir sufriendo. Los primeros 10 km son muy duros, al menos para mí 39x25, con la cabra no sé si hubiera sido capaz sin poner pie a tierra. Por el lado positivo, me sirve para adelantar a bastantes tricolegas e intentar acoplarme en el llano. Aquí ya es otra historia, me empiezan a pasar cabras (y no tan cabras) como aviones. Intento mantener un buen ritmo pero mis lumbares se quejan y descarto los acoples, la cuesta ha hecho daño. Aún así, voy rápido frenando un poco en algunas curvas y cruzando los dedos para no pinchar en un tramo bastante bacheado en algunos pueblos. Aún así, hay muchas rectas bien asfaltadas donde poder demostrar las buenas piernas que tiene cada uno. Las mías, llaneando, son malas. Por fin llego al 1º avituallamiento, cojo un botellín y casi no soy capaz de beber, es tan malo que tienes que exprimirlo como un limón para que suelte algo de líquido.
Un poco más adelante nos mandan girar a la izquierda en una rotonda para hacer una especie de "bucle" y alargar el circuito para que sólo sea 1 vuelta. Aquí, como hay un tramo de ida y vuelta sitúo la carrera con los de mi equipo. Me cruzo con César que casi está parado, no me da tiempo a saber si fue un pinchazo, qué rabia. También me cruzo con Juan (calculo que a unos 5 minutos) y a Pope (sobre 2'). Giro y por detrás vienen Julio (a unos 2'), Hector, Lucas y demás cuadrilla. Me cruzo a Jesús que pinchó, estamos gafados. Termino el bucle ya algo cansado y llego al 2ª avituallamiento, repitiendo exprimidor. Metido en carrera, con ganas de llegar, llegamos a la rotonda del bucle (yo ni idea de dónde estaba) y un ¿voluntario? ¿juez? nos manda ir a la izquierda. Pero veo como alguno que va por delante sigue recto. Dudo qué hacer pero el juez nos dice a la izquierda, y como un tricolega llamado Joserra que me acaba de adelantar gira pues le sigo. A los 500 metros llevo la mosca detrás de la oreja y le digo que vamos mal. Él me dice que sigamos y al ver que ya habíamos pasado por allí doy la vuelta. Con tan buena suerte que un vecino me dice que vuelva a girar que van todos por allí. Así que giro de nuevo y para delante. Aún así, me pasa un juez en moto y le cuento la situación. Para mi sorpresa me dice que no se conoce el circuito, así que pedaleo con un montón de dudas, creyendo que iba mal. 4 km después nos avisan en un cruce a mi compi Pope y a mí que vamos mal, que era recto en la rotonda... Llega Julio y "le
canta unas cuántas serenatas" al voluntario. Impotencia. Rabia. Incredulidad. Bajonazo. Mientras Julio sale de vuelta envenenado, decido hacer los 14 km + 4 km de "compensación" con mi compi Pope de charleta. Al menos es llano y aunque nos pasan corredores nos da igual y vamos comentando qué tal los entrenos y demás. Hasta que a falta de 5 o 6 km se nos acerca un juez en moto y dice que nos va a sancionar. Le decimos que vale, que nos quite el tiempo de los kilómetros que tuvimos que hacer antes y no dice ni "mu" viéndonos las caras de cabreo, arranca y se va. Hizo bien, porque sino le suelto las serenatas de Julio. Para terminar el circuito ciclista toca una última subida de más o menos 1 km y otro km rompepiernas, en el que por inercia cojo un poco de ventaja con respecto a Pope para llegar a la T2 muy desmotivado parando el crono en 2h 10' 31" (parcial 138). Calculo que habré perdido alrededor de 20' y troto por la zona de transición con la intención de "cumplir el trámite" como entreno para el Aviaman de la semana siguiente. Patri me anima y le explico lo que ha pasado. Me dice que siga y tras calzar las zapas decido no poner la gorra porque ya no hace tanto calor... ¡hasta nos llovió 5 minutos en la bici! Vaya tiempo más raro... Bueno, a terminar con dignidad.
SECTOR CARRERA (15 km, 3 vueltas)
Nada más salir de la T2 paro en el avituallamiento pidiendo agua, pero no tienen. Increíble. Sólo hay isotónico así que decido seguir hasta el siguiente. Lo que me faltaba para cabrearme aún más. Bajo una
pequeña cuesta en la que decido resetear y probar las piernas (llevaba 2 semanas prácticamente sin correr y con dolor), para ver si al menos sacaba algo positivo de la prueba. Tras 2 giros a la izquierda llego al paseo del río, llano, de tierra y... con piedras. Otra más. Llevo las voladoras y cada piedra se me va clavando y tengo que andar esquivando las grandes. Y así el 50% del circuito. En fin... Lo bueno de este tramo es que pone los kilómetros que llevas y hay un par de kilómetros de ida y vuelta que te ayudan a situarte en carrera. Mientras adelanto a Héctor (que me pasó en los kilómetros de más en la bici) veo que llevo por delante a Lucas, Julio, Monti, Juan... así que toca darlo todo. Por suerte las piernas responden y decido pelear por lo que pueda. En el giro tomo un vaso de agua del avituallamiento y vuelvo por el camino de tierra, paso a Juan y salgo del paseo para callejear por Villafranca con un par de rampitas que te machacan las piernas si vas muy justito. No es mi caso y gano posiciones con los ánimos de la gente, pasando por la recta de meta y aumentando el ritmo. Segunda vuelta, sigo fuerte, sin dolor de piernas, no me lo creo. En el tramo de ida y vuelta veo a Juan Sotomayor que me sacará unos 3 km, imposible. Pero el resto de la escuadra rojilla estarán a menos de 2 y pongo el cuchillo entre los dientes. Paso a mi compi César, roto por calambres en la espalda, Pope abandona por lo mismo en las piernas, Fer no es capaz de respirar, Rober para a estirar... ¡vaya panorama! Y yo a todo gas, termino la 2ª vuelta y 
 paso a Monti como un cohete, a Julio nada más empezar el paseo y a Lucas 300 metros más adelante, colocándome 3º del equipo. Me cruzo a Juan, me sacará sobre 1,5 km y las piernas ya empiezan a pedir papas. Decido bajar un pelín, no vaya a ser que pierda todo lo ganado hasta ese momento. Bebo el último vaso de agua en el giro de retorno y paso el cartel a falta de 2 km con ganas de terminar y sabiendo que se me iba a hacer duro el final. De todas formas, los que llevo alrededor aún van peor y aunque a menor ritmo continúo ganando posiciones y realizo el último repecho hacia meta enganchándome a un grupillo de 3 corredores, decidido a darles el hachazo final en la recta de meta, a lo grande. Así que giramos a la izquierda, bajamos un par de escaloncitos y 200 metros de recta. Viendo los ritmos, vendo la piel del oso antes de cazarla, me olvido de mi experiencia y arranco. 2 del grupo no hacen ni el amago de seguirme, pero el 3º tiene ganas de juerga. Yo también. La gente empieza a gritar y aquello se convierte en el Noya-Brownlee del Bierzo. Me queman las piernas y regalo lactato sin parar, pero voy a full. El otro también, a medio metro por detrás. 100 metros, 50 metros y se enciende el pilotito. No aguanto. No aguanto. Pienso en frenarme y darle el hachazo final pero no lo veo "legal" y sigo a todo lo que doy. Pero el otro aguanta y me pasa en los últimos 20 metros
entrando justo por delante. La salsa del triatlón y lo más divertido de la carrera. A pesar de que me ha ganado acabo con buen sabor de boca y parando el crono en 3h 53' 03", puesto 49º (el parcial de carrera fue de 1h 05' 37", 8º parcial); calculando a ojo, si no hubiera hecho los kilómetros de más habría estado peleando por el puesto 13º, lo que habría sido un subidón de moral increíble para el resto de la temporada. Pero en ese momento en meta el cabreo no me permitía ni estar contento por lo bien que habían respondido las piernas después de 2 semanas muy malas en cuánto a dolores y sobrecargas. Recupero un poco, hablo con Patri, con los colegas del equipo y decidimos irnos tras coger la bici y la ropa de la T1, que nos las traían en una bolsa. Mi compañero Fady habla con el organizador, que dice que nos invita a participar el año que viene, pero maldita la gracia, yo lo que quiero es mi puesto real. No le doy más vueltas y me acuerdo a última hora que le dejé el DNI a Rober, así que vuelvo a la zona de meta y veo que a mayores de agua, isotónico y fruta que había cuando yo me iba, han traído tortilla, pizza, pasta... así que aprovecho para recuperar fuerzas, volver a charlar un poco con los compañeros del equipo y, un poco más calmado, coger el coche empezando a ver las cosas de otra manera. Ahora ya no hay nada que hacer y el domingo que viene toca otro half (y de los
duros), así que borrón y cuenta nueva. Me quedo con la compañía, las buenas sensaciones y el sector de carrera a pie con sprint incluido. Ahora, a pensar ya en el Aviaman, que seguramente será otro cantar. A ver como responde el cuerpo... ¡nos vemos en la próxima!
 - Horario. La tranquilidad de las pruebas de tarde es impagable.
- Regalos: medalla, camiseta, manguitos, calcetines... y el tardío festín final. No soy pesetero, pero se agradece.
- Ambiente. Entre amigos, así da gusto competir.
- Aparcamiento. Facilidad cerca de la T1 y la T2.
- Entrega de dorsales. Sin colas.
- Kilómetros marcados en la carrera a pie, a mí me gusta.
- Información sobre circuitos: pésima. La natación, neopreno sí a última hora. La bici llana... ¡ni de coña! y con tramos muy bacheados. Y la carrera a pie por tierra con piedras. Creo que todo esto se avisa antes, no es normal ver a gente con cabras poniendo el pie a tierra.
- Un sólo baño en la T1, más de 20' de espera.
- El error del voluntario en la rotonda que nos hizo dar una 2ª vuelta es imperdonable, por muchas excusas que pongan.
- Avituallamientos malos: sin agua en la carrera y botellines malos en la bici, había que exprimirlos para que saliera líquido.
- Separación entre la T1 y la T2. Para el corredor es novedoso, pero para acompañantes y dejar las cosas es un coñazo.
- Último bus a las 14:00 h. para ir a la prueba desde Villafranca... ¡2 horas antes de la prueba! Casi nadie lo cogió, lógicamente.
- El avituallamiento final llegó casi 1 hora después del 1º clasificado, yo lo probé de milagro.

En fin, está claro que era la I Edición, que es imposible controlar todo, que es una distancia muy atractiva y que seguramente han hecho todo lo que han podido, regalando camiseta, manguitos, calcetines, medalla, etc,  pero hay fallos bastante graves que no creo que me hagan repetir, al menos si sigue habiendo tantas pruebas donde elegir y seguramente mejor organizadas. Me quedo con la experiencia, intentaré aprender de los fallos, guiarme más de mi intuición y seguir dando gas a fondo, sin ir más lejos el próximo domingo en el AVIAMAN de Orense!!

PD: aquí os dejo un vídeo de la prueba, espero que os guste!!

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