Que si Armstrong, Alonso, Cristiano Ronaldo... las portadas de los periódicos se repiten una y otra vez con lo mismo. Gol de Ronaldo: portada + 6 hojas y vídeo explicativo. Armstrong gana un triatlón: portada + lo que desayunó para conseguirlo. Alonso segundo: portada + análisis de su trayectoria con todos sus podiums. Y de repente aparece "un tal" José Manuel López haciendo 30 ironmanes en 30 días o "un tal" Gómez Noya campeón del mundo de triatlón y tienes que bajar todo el periódico digital para leer 6 líneas de la noticia (y en prensa escrita con suerte en un recuadro por el final al lado de la programación). Por no decir que preguntas a cualquier persona de a pie (no practicante de triatlón) quién es "Eneko Llanos" y te dicen el entrenador del Mirandés. A lo que me quiero referir con esto es que los medios de comunicación, que deberían hacer eso, comunicar, atribuyen méritos y deméritos a quién les apetece (o mejor dicho, a lo que vende), creando "falsos ídolos" que ganan millones por conducir un coche o dar patadas a un balón; en cambio, atletas que entrenan 8 horas diarias y ganan campeonatos internacionales de judo, triatlón, natación, ciclismo, atletismo, gimnasia... y un inacabable etcétera viven en el más absoluto anonimato teniendo que compaginar trabajo y entrenamiento para poder practicar su hobby. Es decir, si no sales en los medios no puedes vivir de tu deporte. Tan triste como eso. Da igual que te llames Gisela Pulido y hayas sido 9 veces campeona del mundo, David Cal (5 medallas olímpicas y que entrena en Brasil por falta de medios en España) o Toni Bou (7 mundiales consecutivos), la gente cuando se levanta sabe si Fernando Alonso ha salido en bici o si Cristiano Ronaldo ha cambiado de peinado. Pero nadie sabe que Laia Sanz ganó por 13ª vez el Mundial. En fin, podría enumerar un montón de éxitos en casi todos los deportes a nivel nacional que el 95% de la población desconoce y, por tanto, los méritos de estos deportistas los ganan única y exclusivamente con su esfuerzo y trabajo diario. A ver, que no digo que Alonso o Cristiano (por poner un par de ejemplos) no sean unos cracks, pero creo que están infinitamente sobrevalorados con respecto a lo que hacen (sin querer meterme en comparación con otras profesiones, porque entonces podría hacer una tesis de conciencia social). Por ejemplo: Cristiano: se levanta, 2 horitas de entreno, se va en uno de sus Porsches, va al restaurante de lujo y le invitan a comer entre loas y alabanzas, echa la siesta, va a hacer un anuncio y se inclinan a su paso, cena en un restaurante de lujo (invitado, por supuesto) y pal chalé. Sueldo: más de 30 millones de euros anuales. Gómez Noya: se levanta, desayuno, entreno, comida, entreno, cena, descanso (7 días por semana). Sueldo: con suerte puede vivir del triatlón gracias a las marcas publicitarias, sin lujos. Y ya no quiero rizar el rizo con los deportistas populares. Miles de personas que entrenan y compiten trabajando 8 horas al día y con hijos... esos sí que tienen mérito. Y no los conoce ni el tato. Pero ese es otro tema. Yo me refiero, por acortar el círculo, a los que ganan. Me impactó mucho una frase de un americano que leí hace poco: "en Estados Unidos los niños sueñan con ser Bill Gates y en España Messi o Cristiano". Buff, muy dura. Y un fiel reflejo de la "spanish society". Y a ver, a mí también me encantaría ser cualquiera de ellos, no nos engañemos. Pero creo que su nivel de vida dista mucho de sus méritos en comparación con miles de deportistas campeones del mundo y casi anónimos. No sé cuál sería la tecla mágica para que la gente se diese cuenta que hay un "Rafa Nadal" o un "Gómez Noya" en casi todos los deportes y que nos tiene que "tirar de un pie" los calzoncillos que usa Messi o que Alonso tiene nueva novia. Creo que estamos en un momento clave que debería servirnos como punto de inflexión para darnos cuenta que hay que valorar a cada deportista por sus verdaderos méritos y no por lo que nos cuenten los periódicos, darnos cuenta que existen multitud de deportes que valen la pena y que nuestros deportistas merecen ser tratados como lo que son, campeones del mundo... ¡y a mucha honra!
Y en cuanto a mí, parece que veo la luz al final del túnel. Tras 2 semanas en el dique seco, la prueba de ciclismo del fin de semana sin molestias me hace ver las próximas semanas con optimismo. Aunque el entreno sigue siendo prácticamente nulo...
Sábado, 16/11/13: Bici estática: 20' - 7 km + Gym: 25' circuito + Natación: 25' - 1 km
Domingo, 17/11/13: Ciclismo (pista): 45' - 16 km
Y a pesar de estar bastante fastidiado por culpa de no poder entrenar en el inicio de la temporada y de perderme carreras como el duatlón de Ribeira, la San Martiño o la próxima media de Ferrol, empiezo a esbozar la sonrisa pensando que no ha sido tan grave y que pronto podré retomar los entrenos con normalidad (y con cabeza), toco madera... ¡buena semana!
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